martes, febrero 14, 2012






"El Ayuno como prueba de nuestra fe"

PorLupita Vital Cruz




La Cuaresma tiempo para reordenar nuestra vida.



  • Nuestra vida espiritual


  • Nuestra forma de comer


  • Renovar la vida de oración


  • Ayunar y hacer penitencia

Dar parte de nuestras pertenencias a otras personas que lo necesitanLa palabra de Dios es parte clave y nos invita a reflexionar en lo siguiente. “El tiempo se ha cumplido, el Reino de Dios está cerca. Cambien sus caminos y crean en la Buena Nueva.” Tomando momentos de reflexión durante el día podremos renovar o empezar nuestra vida espiritual. El cambio de corazón vendrá con la práctica de actos de piedad.


El ayuno ha sido muy importante a lo largo de la historia de la cristiandad y este está íntimamente ligado a la vida de oración y nos invita a compartir los bienes que se tienen con otras personas. Especialmente los que viven en la pobreza.Recordemos que el ayuno nos une a todas las personas que sufren nos hace libres y nos asemeja a Jesús que siempre estuvo con los pobres. Además debemos de recordar que por nuestro bautismo abrazamos a los pobres y estamos en comunión con ellos.Nuestra comunión con el pobre y los que sufren nos compromete.


Vivir con sencillez tal como viven los que tienen poco. Buscar la justicia para todas las personas en el mundo. A vivir cada día en la caridad y en el amor junto con los pobres que nos rodean
Agradecer a Dios todo lo que tenemosPero quizá nos preguntamos ¿cómo puedo ayunar si trabajo todo el día? O peor aún como inmigrantes tenemos muchas veces dos turnos de trabajo. Tenemos razón pero Jesús espera que caminemos con El, en esta Cuaresma y sabe que podemos dar más de lo actualmente estamos dando, porque el Espíritu Santo nos da la fuerza. La Biblia nos dice que ya desde el Antiguo Testamento se ayunaba para obtener el perdón. Los siguientes pasajes te pueden ayudar en tú reflexión diaria:


Levítico 16:29
Joel 1:14
Isaías 58:3
Tobías 12:8
Jueces 20:26
Éxodo 34:28
Judith 4:13 ;
Ester 4:16


Jesús mismo nos invita a ayunar a no poner cara triste, sino a perfumarnos la cabeza y salir adelante.
Mateo 6:16
Lucas 4:2
Hechos 13:3
Hechos 14:23


En resumen, preparemos nuestro espíritu y nuestro cuerpo con alguna acción en esta Cuaresma. De esta forma estaremos más comprometidos con Jesús al llegar a la Pascua. No olvides que al ayunar y hacer oración nos preparamos mejor para escuchar la voz de Dios.